Reto para los sentidos

En Madrid no hay ninguna dirección fija para el interiorismo experimental, pero sí un nombre de referencia: Casa Decor. Cada año, la exposición se celebra en un lugar diferente. Últimamente se ha optado por el elegante barrio de Salamanca, y así se ha hecho también en esta ocasión. La “casa” de este año es un edificio residencial situado en la calle Goya 89, cuyos amplios espacios ofrecen una variedad de superficies de alto nivel donde diseñadores, arquitectos y empresas pueden crear libremente. Entre los siempre espectaculares y a menudo caprichosos mundos del diseño y la vivienda, este año ha destacado uno especialmente: el proyecto Tacto Sereno, ideado y realizado por Patricia Bustos Studio para el fabricante español de equipamiento de baño Bathco.

Todo el diseño del espacio está inspirado en Gaudí y en el arquitecto uruguayo Eladio Dieste, famoso por sus construcciones curvas. Las paredes redondeadas y sinuosas, construidas con ladrillos en tonos claros, o los marcos de las puertas y los revestimientos murales a base de ratán sin procesar tienen, ante todo, un carácter háptico. La creadora de este particular mundo de sensaciones mullidas quiere devolvernos a un estado primigenio, al tacto puro de las superficies y los materiales. Al mismo tiempo, apuesta por la imperfección en el trabajo artesanal, por las pequeñas irregularidades que hacen que cada pieza sea única y que establecen una relación directa con su creador y su personalidad.

En el más puro espíritu de Gaudí, que entendía la arquitectura como un arte integrador que lo englobaba todo, Tacto Sereno también constituye una obra de arte completa de carácter propio. En ella se incluyen los dos esculturales lavamanos de Bathco presentes en el centro de la puesta en escena de una recepción de hotel, que se entienden más como fuentes u obras de arte propiamente dichas que como servicio de higiene. Y lo más insólito es que no parecen fuera de lugar. Como tampoco lo parecen los interruptores y las bases de enchufe de la gama de interruptores Gira E2, que, en comparación con todo lo demás, aportan una reconfortante rectitud de líneas, convirtiéndose en un punto de absoluta normalidad dentro de un mundo de fantasía en tonos pasteles que tiene un poco de Gaudí y un poco de Barbie. Pero, en cualquier caso, constituye toda una experiencia.